Keegan Grandbois es un fotógrafo nacido en San Diego residente en Brooklyn que retoma el imaginario de la cultura pop americana. Sus imágenes de arquitectura urbana desierta y de objetos cotidianos son hermosas, pero al mismo tiempo producen una sensación irritante y nostálgica que atrapa a quien las mira. Es un juego entre la presencia y la ausencia.
Con frecuencia encontraremos flores de plástico que, según él, constituyen el intento más absurdo de la humanidad de hacer perdurable algo que por naturaleza tiene el destino de desaparecer, como los recuerdos.
“Me gusta el concepto de plantas falsas, la preservación de la idea de algo que existe de forma natural, es hermoso, extraño, triste y confuso como un montón de cosas”, dice Grandbois.
Aquí las imágenes de su nuevo proyecto “Still Life”.